jueves, 25 de marzo de 2010

Cómo integrar cocina y comedor de manera armónica

La integración de la cocina y el comedor es una opción habitual en las casas de hoy, no solamente por cuestiones de espacio sino también por la funcionalidad que supone esta posibilidad. Sin embargo, el hecho de contar con “puertas abiertas” entre comedor y cocina no significa la invasión de un espacio sobre el otro.

En consecuencia, uno de los principales desafíos en este tema es lograr armonía en la integración de ambos espacios, para que de esta manera se potencien pero sin perder su individualidad. Se trata de dos ambientes que pueden estar perfectamente juntos en una misma habitación, pero que igualmente tienen sus características particulares.

Cuando el espacio lo permite, una buena idea puede ser intentar separarlos al menos de forma visual, sin que existan muros o separaciones físicas. De esta manera, estaremos integrando los espacios pero sin perder privacidad e independencia en cada uno de ellos. Es la idea que nos muestra delikatissen.com en la foto, y que indudablemente resulta muy atractiva.

La separación en este caso se ha dado a través de los juegos cromáticos realizados, ya que mientras el área de cocina se diferencia por el uso del negro, en el sector de comedor se ha optado por el blanco y los colores claros, aprovechando al mismo tiempo una ventana para brindar luz y calidez al último sector mencionado.

Tanto la cocina como el comedor cuentan con sus respectivos complementos y mobiliario, sin que existan elementos de uno de los sectores que se entrometan en el otro. De esta manera se facilita la separación visual y el orden, un punto trascendente al tratarse de espacios compartidos donde se quiera establecer una separación pero sin emplear estructuras físicas.

jueves, 18 de marzo de 2010

Tipos de griferías de cocina

Uno de los puntos más importantes en la decoración y funcionalidad de la cocina lo marca sin dudas la elección correcta de las griferías a colocar. Existen diferentes modelos y posibilidades, que es necesario evaluar al planificar el diseño de esta estancia o al redecorar una cocina al comprar una nueva propiedad.

Los muebles de cocina, la encimera o los electrodomésticos son realmente muy importantes, y son capaces de dominar visualmente la estancia. Sin embargo, no debe obviarse la elección de la grifería, ya que es también otro de los elementos de gran trascendencia en cualquier cocina. En la imagen apreciamos un modelo de la firma especializada Ritmonio.

Entre la gran variedad existente en cuanto a griferías pueden mencionarse algunas tipologías, que son habitualmente las más empleadas:
  • Grifos tradicionales: son los más económicos, pero el hecho de contar con dos mandos implica la combinación de agua en forma manual, lo que disminuye el confort. Además, estos grifos generan habitualmente inconvenientes a medio y largo plazo, por ejemplo al tener que cambiar gomas aislantes y arandelas, entre otros accesorios.
  • Grifos monomandos: son más caros, pero brindan más confort gracias al mezclado automático de agua. También es más sencilla la instalación y se requiere un menor mantenimiento. Además, suelen presentar diseños más modernos y llamativos.
  • Grifos monomandos con teléfono de ducha: es un accesorio novedoso que permite controlar y dirigir la cantidad de agua y la precisión buscada. De esta manera, las tareas de aseo y limpieza se hacen más sencillas.
  • Grifos con monomando artesanal: esta grifería se diseña especialmente para un mobiliario de cocina de estilo tradicional. Sin embargo, aunque estéticamente aportan mucho, los materiales empleados en estos grifos exigen un mantenimiento mayor para poder preservarlos adecuadamente.

jueves, 11 de marzo de 2010

La historia de la nevera

La nevera o refrigerador es hoy un electrodoméstico infaltable en cualquier cocina. Sin embargo, este aparato tiene una larga historia hasta llegar a las amplias prestaciones que nos ofrecen las neveras actuales. Y para conocer los antecedentes del refrigerador tal cual lo conocemos hoy, hay que remontarse a principios del siglo XIX.

Entonces, ¿quién inventó la nevera?

El inventor estadounidense Oliver Evans creó en el año 1805 la primera máquina refrigerante. En 1815, el también norteamericano John Goorie, un médico de Florida, diseñó un refrigerador basado en el diseño de Evans con el propósito de fabricar hielo para sus pacientes de fiebre amarilla, que necesitaban un ambiente con el aire más frío.

Posteriormente, el ingeniero alemán Carl von Linde patentó en 1876 el proceso de licuado de gas, un punto importantísimo en la tecnología de refrigeración. Para lograrlo cambió algunos detalles de un modelo industrial que había diseñado para una fábrica, creando de esta manera el primer refrigerador doméstico mecánico.

Carl Von Linde Durante el transcurso del XIX, muchos inventores intentaron diseñar refrigeradores mecánicos. El refrigerador emplea la evaporación de un líquido para absorber calor. Ese líquido o refrigerante se evapora a una temperatura muy baja, permitiendo el desarrollo de temperaturas heladas en el interior del recipiente empleado como refrigerador.

En ese marco, los primeros refrigeradores eran muy grandes e incómodos. Empleaban además amoniaco, una sustancia corrosiva y tóxica. De esta manera, se utilizaban solamente en el ámbito industrial. Se necesitaron muchos años para lograr que las neveras fueran prácticas y pudieran utilizarse en los hogares.

Esquema de refrigerador basado en el modelo de Oliver Evans Recién en el siglo XX comenzó el uso de los refrigeradores en los hogares. Un monje francés creó uno de estos primeros modelos, presentado por la compañía General Electric en 1911. Luego llegaron los modelos Kelvinator y Servel, que fueron introducidos en el mercado estadounidense en 1916. Para 1920, ya existían más de 200 modelos de neveras para uso hogareño. Con el tiempo se fueron eliminando las distintas sustancias tóxicas y se incorporaron distintos adelantos tecnológicos, hasta llegar a las neveras inteligentes de la actualidad.

Frigorífico Samsung moderno Ahora que ya sabes algo más sobre la historia de la nevera puedes seguir profundizando en el tema con otros artículos de este blog:

jueves, 4 de marzo de 2010

Electrodomésticos de colores

Si queremos brindar un toque de alegría en la cocina, esta nueva tendencia de los electrodomésticos de colores puede ser realmente muy interesante. Se trata de otra de las innovaciones que aplican periódicamente las empresas fabricantes de electrodomésticos, y que puede ser muy importante al crear un llamativo contraste con el típico alicatado blanco.

Hay múltiples opciones para aprovechar convenientemente estas alternativas. Si se busca una cocina en estilo moderno, o se intenta combinar la rusticidad y la modernidad, se puede alicatar la estancia con azulejos blancos y disponer al mismo tiempo, a la altura donde se ubicará el electrodoméstico, de un sector de azulejos del color que tendrá el aparato.

Estos elementos también pueden combinarse con otros detalles y elementos, como por ejemplo una vitrocerámica, una chapa rústica, una campana extractora de aire de metal o muebles de madera con aspecto antiguo, entre otras opciones. De esta forma, la combinación entre rusticidad y modernidad se habrá logrado a la perfección.

El revestimiento del suelo es otra herramienta muy útil para lograr incorporar adecuadamente electrodomésticos de colores en nuestra cocina, como el que observamos en la imagen y pertenece a la empresa Smeg. Es que es posible colocar baldosas en la modalidad damero, combinando el color de los azulejos de las paredes con el tono del electrodoméstico a colocar.

Vale destacar que la empresa Smeg es una firma italiana especializada en electrodomésticos que se piensan como verdaderos elementos de decoración, con el propósito de combinar la última tecnología con un personal estilo estético. En ese mundo, los electrodomésticos de colores ocupan un lugar primordial.